Unos 860.000 euros ha sido la inversión del Gobierno en la rehabilitación de la casa cuartel. Los trabajos han consistido en la creación de oficinas y servicios que ocupa la mayor parte de la planta baja del cuartel. El resto del edificio se compone de cocheras y de doce viviendas para guardias civiles, una de ellas adaptada a minusválidos tal y como exige la legislación vigente.

Con la reforma del edificio, se han creado nuevas dependencias como cuatro calabozos que antes no existían. Lo mismo ocurre con una sala de reconocimiento para los detenidos, una sala de juntas, un gimnasio, un área de descanso y unos vestuarios para mujeres. La construcción original fue dirigida por el arquitecto Francisco Vaca y la ha terminado Carlos Alvarez.