Desde que el ayuntamiento comenzó a diseñar la ruta del vino Ribera del Guadiana hace más de dos años hasta ahora, han sido 96 empresas las que se han adherido a este proyecto cuyo objetivo es fomentar el enoturismo de Almendralejo y de la zona, informó ayer la delegada de Turismo, Josefina Barragán. De estas, casi la mitad son firmas almendralejenses, unas 40.

Estas cifras rompen las expectativas que se había marcado el ayuntamiento cuando inició el proceso, ya que Barragán reconoció que esperaban un máximo de 30 empresas, e indicó que, de hecho, "cada vez más se han ido apuntando e incluso acuden a la oficina de turismo para preguntar qué tienen que hacer o cómo pueden participar", apuntó.

La gran mayoría de estas empresas han tenido que acometer o están en proceso una serie de mejoras en sus instalaciones para poder cumplir con los requisitos que exige la Secretaría General de Turismo del Ministerio de Comercio, Turismo y Comercio, que es la que otorga la certificación de ruta del vino. Para ello han recibido instrucciones y asesoramiento sobre las exigencias del Gobierno central por parte de la Asociación Nacional de Ciudades del Vino (Acevin).

Entre las empresas con sede social en Almendralejo se encuentran casi todas las bodegas, hoteles, restaurantes, bares de vinos, establecimientos comerciales, empresas relacionadas con el ocio y tiempo libre (incluso una compañía de teatro) y una empresa de servicio de transporte.

MAS PARTICIPANTES La ruta del vino también incluye otras adhesiones, como son instituciones y colectivos. Son muchos los ayuntamientos y oficinas de turismos que también han querido formar parte de ella. Es el caso de municipios como Alange, Cañamero, Santa Marta de los Barros, Mérida, Olivenza, Los Santos de Maimona, Trujillo, Villa de Alía y Villafranca de los Barros. Entre los organismos, citar el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Ribera del Guadiana, la Confederación Regional Empresarial Extremeña, la Confederación Empresas turísticas de Extremadura o la propia Junta.

En cuanto a la certificación, Josefina Baragán manifestó que para concedérsela primero deben pasar una auditoria, "como una especie de examen", en la que responsables de la Secretaría General de Turismo se trasladarán a Almendralejo para realizar una inspección. Estaba previsto que esto se llevará a cabo a finales de este año, pero cabe la posibilidad de que se aplace para principios del año que viene. "Después, tendremos que pasar cada año una inspección", dijo la concejala.