Los almendralejenses ya conocen cómo será la fisionomía de la nueva Plaza de Extremadura, cuya remodelación integral pertenece a una obra de los fondos Edusi, cofinanciado en un 80 por ciento por fondos europeos. Finalmente, el proyecto de obra tendrá un presupuesto de 1,5 millones de euros, según se dio a conocer en la presentación a la que asistieron el alcalde, José María Ramírez, el concejal de Urbanismo, Antolín Trigo, y el arquitecto del proyecto, Antonio Matamoros. ​El proyecto se ha implementado en 300.000 euros más de la cantidad inicialmente prevista, ya que la obra ha precisado de un análisis pormenorizado de las galerías de aguas que discurren por el subsuelo, sin olvidar que antiguamente, a este punto de la ciudad, convergían los arroyos Charnecal y Cagancha, además de saber los problemas habituales de inundaciones que se han producido en el pasado.​

La nueva Plaza de Extremadura se convertirá en un punto de referencia para la ciudad y su remodelación persigue un doble objetivo: ofrecer un espacio peatonal más amplio y por otro lado, ser «puerta de la ciudad» para los visitantes que entran desde direcciones como Mérida o Badajoz.​

Homenaje

La nueva imagen de la plaza es un homenaje al antiguo Pilar Viejo que desapareció allá por 1973, pero que durante muchos años fue un punto esencial para potenciar la economía y la agricultura de Almendralejo. Por ello, uno de los elementos destacados es la imagen del antiguo Pilar «como parte del patrimonio de la ciudad» justo sobre la nueva glorieta más ovalada que será reubicada en un espacio más céntrico de la plaza, entre los entronques de las calles Pilar, Altozano y Badajoz. De ese pilar saldrán seis líneas blancas que discurrirán por toda la plaza y se levantarán en una pérgola «que dignifica esa entrada a la ciudad», explica el arquitecto, Antonio Matamoros. «La historia de este proyecto es importante, ya que es un homenaje al agua, a nuestros antepasados y al origen de esta zona», añade.​

Se actuará en una superficie total de más de 10.000 metros cuadrados, quedando una zona peatonal de 2.448 metros cuadrados. Se conservará parte de la arboleda y se colocarán nuevos árboles en el perímetro para obtener zonas de sombra. Hay una zona grande para juegos infantiles y un espacio diáfano destinado al disfrute de los peatones. ​

Las obras comprenden la renovación de las galerías de saneamiento y otros servicios como la red de alumbrado que será igualmente sustituida casi al completo. Antolín Trigo ha explicado que por debajo de la plaza confluyen dos galerías de agua. La que pasa por la avenida de la Paz se va a reforzar y la que pasa por Suárez Bárcenas se va a sustituir. ​

La remodelación de la plaza supone una reorganización de la circulación viaria. La calzada que pasa junto a la churrería Pilar queda eliminada y se convierte en zona peatonal. Habrá una vía de doble sentido por delante de la puerta del Hotel Acosta Centro, por donde se podrá ir en varias direcciones. ​

Plazos

La licitación de las obras se hará en julio. El alcalde no ha querido dar plazos, aunque indica que, como mínimo, hay cuatro meses de proceso hasta adjudicar el contrato. La obra se haría en ocho meses, por lo que, en principio, la nueva Plaza de Extremadura sería una realidad a lo largo del año 2021.