Los empresarios del polígono industrial de la Ciudad Deportiva mostraron ayer sus quejas porque el alcantarillado de la zona está obstruido como consecuencia de los vertidos procedentes de la fábrica de mantecas lo que están originando la creación de grandes charcos y salideros de agua por los sanitarios.

Según estos empresarios, se temían que ocurriera esto cuando comenzaran las lluvias de otoño. Aseguran que el agua se sale de las alcantarillas y también de los sanitarios de las empresas desde que se han intensificado las lluvias, lo que está dando lugar a la aparición de lagunas en las calles al no poder tragar el agua de la lluvia. Señalan que este entrape lleva tiempo y está provocado por los vertidos que realiza la empresa de mantecas, que el mes pasado recibió la autorización ambiental de la Junta de Extremadura y, por tanto, puede volver a retomar su actividad industrial.

Los empresarios comentaron que el agua tiene un olor insoportable al tener restos de grasa y que además hace que el olor se quede en la suela de los zapatos al pisarla y tengan que entrar en sus establecimientos con ese olor. Incluso hay trabajadores que no pueden acceder al interior de sus centros de trabajo andando y tienen que hacerlo con sus vehículos porque hay grandes charcos de agua provocados por la lluvia que no recoge las alcantarillas debido a la citada obstrucción.

La propietaria de Serviauto apuntó, por ejemplo, que ayer tuvieron que ayudar a uno de sus clientes "cogiéndolo en brazos" para entrar en el taller porque tienen un gran charco en la entrada. Incluso, se quejan de que el suelo resbala porque se quedan los restos de grasa cuando se seca el agua.

ALCANTARILLAS LEVANTADAS Además, a y pesar de que se arregle el problema, las grasas se quedan en las tuberías y cuando llueve rebosan por las alcantarillas provocando suciedad y el citado mal olor. Por estos motivos, tienen todas las alcantarillas del polígono levantadas, para que así puede tragar mejor el agua. También consideran peligroso que el agua llegue a los cables de la red eléctrica que hay en una de la calles, ya que la tapa también está quitada y los cables están al descubierto. Temen que el contacto del agua con los cables pueda causar un incendio.

El miércoles avisaron a la empresa del servicio de agua, Urbaser, para que arregle el atasco y avisar de las inundaciones que hay en la vía pública. Desde ese día los operarios están trabajando en ello, pero con la lluvia caída la pasada madrugada y de primera hora de la mañana de ayer el agua volvió a rebosar de las alcantarillas.

Los empresarios también hablaron ayer con el concejal de Industria, Carlos González Jariego, quien les explicó que están trabajando para solucionar el problema y no se vuelva a repetir.