El espíritu emprendedor de Almendralejo y su excelente ubicación en una zona donde la aceituna es gran protagonista, propiciaron que hace tres años naciera la planta Olives & Pickles en la capital de Tierra de Barros. Recientemente, según ha podido saber este periódico, la firma ha superado ya los 10 millones de euros en inversión desde su puesta en marcha y su funcionamiento, rentable y eficiente, está dando beneficios y trabajo a muchos almendralejenses.

Olives & Pickles forma parte de un proyecto consistente en una planta de aderezo y envasado de aceitunas de mesa que utiliza la última generación para sus procesos de elaboración y el lanzamiento de nuevos productos de relleno. Sus responsables indican que la mayoría de la inversión se ha destinado a la instalación y puesta en marcha de líneas de recepción de aceituna en verde, líneas de semi-trasnformado y envasado de aceituna de mesa en diferentes formatos. Dicha inversión se ha realizado paulatinamente y en la mente de sus creadores ya se planifican más para sacar nuevos productos. Solo en 2016 su facturación fue de 29 millones de euros.

La planta instalada en Almendralejo da trabajo a más de 150 personas, la mayoría de ellos de la ciudad y de localidades cercanas. Desde la empresa señalan que «el desarrollo de nuestra actividad productiva precisa tanto de personal que desarrolle su trabajo en líneas de envasado, así como una importante actividad de industria auxiliar encaminada a la realización de reparaciones, mejoras de instalaciones, cumplimiento de obligaciones medioambientales y sanitarias, asesoramiento legal y laboral o transporte».

Aunque distribuyen por toda España, su apuesta de negocio y sus inversiones están claramente marcadas para un proceso de internacionalización en el que están trabajando en profundidad.

Las instalaciones de Olives & Pickles de Almendralejo están situadas en la calle Mecánica (número, 7), justo en el polígono industrial de la carretera de Arroyo de San Serván. Los responsables no descartan seguir ampliando instalaciones en caso de necesitarlo, aunque este año la producción de aceituna se ha resentido con una bajada considerable.