Casi un año lleva cerrado al público el parque Ramón y Cajal, en la barriada de San Roque, justo cuando en marzo del pasado año se cerrara de manera provisional para preservar la seguridad de los ciudadanos y acometer una serie de reformas, entre ellas, la renovación de los juegos infantiles, la construcción de un campo de fútbol de césped artificial o el arreglo de un problema que había para recoger las aguas pluviales. Casi un año después, los vecinos siguen pidiendo que se reabra, circunstancia esta que parece más cercana.

La concejala de Parques y Jardines de Almendralejo, Tamara Rodríguez, ha señalado que «nos encantaría ser los primeros en decir que se abrirá, pero las obras han ido más lentas de lo que nos hubiera gustado y al proyecto le quedan detalles», insinuando de esta forma que la reapertura del parque está próxima.

Una de las últimas actuaciones ha sido la renovación de los juegos y elementos infantiles. La edil ha subrayado que al proyecto inicialmente aprobado se le ha añadido un tobogán más y justifica la demora porque había que sembrar el césped y esperar a que la hierba creciese un poco para poder ser pisada, además de probar el sistema de riego.

De hecho, Tamara Rodríguez explica que no se descarta acotar esa zona y reabrir el resto al público de manera provisional, aunque considera que lo ideal sería abrir el recinto al completo.

Además, han tenido que cambiar algunas luces, algo que tampoco se había proyectado inicialmente, informó la concejala, quien también precisó que la sede la asociación de vecinos, situada en la parte central del parque, también ha estado en obras.

Así, las cosas, el equipo de gobierno reitera que al proyecto inicial le faltaban ciertos detalles y por eso han creído conveniente ejecutarlos para que el parque fuese lo más completo posible.

Plagas/ La delegada de Parques también se ha referido a algunas plagas que afectan a plantas municipales como la del picudo rojo sobre las palmeras. Esta enfermedad ocasionó muchos problemas el año anterior. De hecho, desde la concejalía se están realizando labores preventivas sobre las palmeras para impedir que cause más desperfectos.

La plaga afectó a cinco palmeras del parque de la Piedad y tres del de Santa Clara, aunque lograron salvar algunas, pero sí tuvieron que retirarse otras de domicilios particulares en casas en el pueblo y en chalés.