Pedro José Fernández, un inspector jefe de la comisaría de Almendralejo, se disparó ayer en la cabeza en su domicilio de la calle Méndez Núñez. El tiro le hirió gravemente, pero no le causó la muerte. Tras dispararse, bajó a la calle por su propio pie y pidió ayuda en una tienda cercana a su domicilio. De inmediato, fue trasladado en un coche de la policía local al centro de salud y de allí, en ambulancia, al hospital Infanta Cristina de Badajoz donde se le atendió de sus heridas. No se teme por su vida.

El inspector jefe herido tiene 52 años de edad y llegó a la comisaría de Almendralejo hace varios años procedente de la localidad sevillana de Alcalá de Guadaira. En la actualidad, el agente policial se encontraba de baja laboral a causa de una depresión nerviosa que padece.

EL ARMA UTILIZADA Se da la circunstancia de que el arma reglamentaria del inspector le había sido retirada por orden judicial tras una denuncia que interpuso su propia esposa, de la que está en proceso de separación. Así, la pistola utilizada ayer es otra que el inspector de policía posee pero de la que se desconoce su procedencia y que no se relaciona con su actividad profesional.