La policía local en colaboración con la Policía Nacional desmanteló ayer un campamento ilegal de personas de nacionalidad rumana en la avenida de A Rúa.

Según las ordenanzas municipales, no se puede haber asentamientos de más de tres días en el casco urbano y según la policía estas personas llevaban varias noches durmiendo en el mismo sitio. El inspector jefe en funciones de la policía local, Miguel García, aseguró ayer que han recibido información de ciudadanos en el sentido de que los rumanos llevaban bastante tiempo en la calle asentados. No obstante, cuando los agentes ha acudido en anteriores ocasiones, ya se habían marchado.

MUEBLES AMONTONADOS El desmantelamiento se produjo a las ocho de la mañana. En ese momento había cuatro personas, pero al parecer, por la cantidad excesiva de muebles que tenían almacenados, el número de rumanos que vivía en el campamento era mucho mayor. Según García, tuvieron que utilizar en dos ocasiones un camión del Servicio de Obras del ayuntamiento para poder transportar los muebles y enseres que habían amontonado estos días.

Los agentes explicaron a los rumanos que allí no podían estar porque lo impide la ley y les informaron de los campamentos de acogida que hay en ciudades de la provincia como el Don Benito o Badajoz, donde pueden trasladarse. "Ellos lo entendieron perfectamente y se marcharon sin ningún tipo de problemas", explicó el inspector.

No es la primera vez que la policía desmantela este tipo de campamentos en la ciudad.