Emprendedor, Emblema de Extremadura, Embajador del Cava de Almendralejo y ahora pregonero de las Fiestas de la Piedad y Feria de la Vendimia. José María Fernández de Vega, almendralejense de 42 años, jamás hubiera imaginado hace apenas una década que coleccionaría tantos reconocimientos y mucho menos, como a veces él confiesa, que haría una película de cine. Pero la vida da muchas vueltas y los sueños, a veces, se cumplen. Sobre todo si se pelean con la insistencia que lo ha hecho él, un currante del diseño y la realización hecho a sí mismo.

El pregonero de las fiestas 2019 no tuvo un camino marcado en sus inicios. De hecho, su historia en el mundo prelaboral comienza estudiando varias ingenierías técnicas que nada tenían que ver con su pasión: el diseño. Se cansó de lo primero y, como muchos, fue a por lo segundo. Decidió emprender camino en el arte digital y el diseño en animación de manera autodidacta. En 2004, creó la empresa Claroscuro Digital, un estudio de diseño especializado en la recreación infográfica 3D para el mundo de la construcción, la ingeniería y el interiorismo. Años más tarde, en 2010, fundó Glow, una productora audiovisual radicada en Extremadura y especializada en animación y postproducción, con la que trabaja para compañías publicitarias.

Con este proyecto ha tocado el cielo, si es que hay límites en su imaginación. De momento, con Glow, ha logrado ser coproductor de la primera película de cine de animación realizada íntegramente en Extremadura. Para ser más exactos, íntegramente en Almendralejo. Su esfuerzo por hacer de su tierra el punto de referencia le llevó a que se abrieran en la ciudad los primeros estudios de animación digital que hay en Extremadura y que son referente ya en España y en Europa, situados en la Factoría de la Innovación. Allí se ha cocinado a fuego lento la película Buñuel en el laberinto de las tortugas, un éxito que está dando la vuelta a medio mundo. Este mes se proyecta en cines de Nueva York y Los Ángeles.

Realizador, grafista, productor audiovisual y almendralejense de pro: «Estoy muy agradecido por ser el pregonero. No es algo que haya hecho nunca, pero tampoco había hecho una película y ha salido muy bien», bromeaba el día en que conoció su designación.

Este miércoles subirá al atrio de la Piedad un hombre que ha labrado su propio camino persiguiendo un sueño que parecía inalcanzable. Ese sueño que solo los que persisten terminan agarrándolo con fuerza.