El radar que gestiona la policía local y que controla la velocidad en distintas zonas interurbanas de Almendralejo ha multado a más de un millar de conductores en lo que va de 2016, según los datos ofrecidos por el delegado de seguridad, Luis Alfonso Merino. Los informes desvelan que se han instruido 270 expedientes sancionadores trimestralmente en este curso, a expensas de cerrar aún el último trimestre, lo que indica que se han sobrepasado las mil denuncias por exceso de velocidad.

El 98% de estos expedientes están calificados como graves, es decir, sobrepasan los 50 km/h con un margen que no llega a los 100km/h. Las sanciones para estos conductores oscilan entre los 100 y 500 euros más la retirada de entre dos y cuatro puntos del permiso de circulación. El resto (2%) son expedientes muy graves, es decir, de vehículos que han sido cazados a más de 100km/h. La multa puede ser de 600 euros y la pérdida de seis puntos en el carnet. Hay casos especiales como el ocurrido el pasado febrero cuando un infractor fue cazado circulando a 123 km/h por la avenida Presidente Juan Carlos Rodríguez Ibarra. A esto se le considera como un delito contra la seguridad vial por conducción temeraria con penas que pueden ir desde los tres a seis meses de prisión y la retirada automática del carné.

Más del 50% de estas denuncias corresponden a vehículos domiciliados en Almendralejo. El radar no es fijo y suele estar cambiando de posición. Su presencia es más habitual en vías como las avenidas Presidente Juan Carlos Rodríguez Ibarra y Sevilla, Rafael Alberti, A Rúa o en la carretera de Badajoz.

Por otra parte, la policía local dispone desde la pasada semana de un drogo test de última generación. Se trata de un sofisticado aparato de control y detección de drogas. Fruto de una campaña, y a instancias del agente, al existir indicios de que el conductor ha consumido drogas o si ha estado implicado en un accidente, se le toma una muestra de saliva que luego es analizada por un laboratorio toxicológico que revela el tipo de sustancia consumida, en caso de ser la prueba positiva. Explica Merino que las sanciones por consumo de estupefacientes al volante pueden ser de 1.000 euros y la retirada de seis puntos del permiso de conducir.