El alcalde José María Ramírez consideró ayer, en su tradicional valoración del año que acaba, la importancia que han tenido los "esfuerzos" personales realizados en el consistorio para que el desempleo en la ciudad no haya crecido más. Esos "esfuerzos", a los que se refiere, son las medidas de recortes que se llevaron a cabo en junio de este año consistentes en la eliminación de puestos de confianza, la disminución de concejales liberados, el recorte de gastos o la reducción de las asignaciones políticas "que han permitido crear una bolsa de empleo" para contratar a parados almendralejenses.

Para Ramírez, el 2010 dejará un "sabor agridulce" porque Almendralejo también está "inmerso en una crisis nacional e internacional con sus efectos perversos y nocivos". Incluso utilizó un símil bélico para referirse al desempleo al considerar que se está "perdiendo una batalla" al ver cómo crece por la crisis. No obstante, destacó una serie de actuaciones que a su juicio han permitido una desaceleración del desempleo en la ciudad, y añadió: "También hemos ganado batallas con algunos casos que encontraron una solución como el colegio Ruta de la Plata, la alcoholera de Viñaoliva, el hospital El Pilar o el de Aprosuba 2", enumeró el alcalde quien además resaltó "la apertura de otros frentes" en cuya apertura o consolidación el ayuntamiento también ha colaborado durante esta legislatura como el hotel Acosta, Konecta, E-Leclerc o Gerovitalia, que han dado puestos de trabajo.

Asimismo, destacó las 850 contrataciones hechas durante este 2010, "que para algunos puede ser insuficientes, pero que se trata de un esfuerzo importante, mayor que el que han hecho otras ciudades". Tras reconoció que no se puede llegar "a todo el mundo", dijo que hubiese "sido peor sino se hubiese hecho ninguna de estas acciones". Asimismo, resaltó el hecho de que se estén creando más empresas pese a la crisis y de los inconvenientes que están teniendo algunos empresarios, "solo hay que ir al polígono y ver los proyectos y las firmas instaladas", dijo.

VALORACION DE LEGISLATURA Para Ramírez, esta legislatura, a la que le quedan cinco meses, ha sido la de la "consolidación de las infraestructuras urbanas, económicas y sociales que han hecho que Almendralejo pase a estar en el mapa de donde había desaparecido hace años, en el mapa como una ciudad fuerte y pujante". Para él, las acciones que han permitido que "sea un referente en la provincia" son la carretera de circunvalación, la ITV fija, el parque de maquinaria, el centro de salud de San Roque, la evolución del hospital, el Museo de las Ciencias del Vino, la programación regular del teatro Carolina Coronado y la universidad popular, el archivo municipal, la ampliación de la Colección Monsalud, la oferta complementaría amplia de los centros educativos y el proceso integral de renovación urbana que han sufrido muchas calles y que culmina con la transformación de la antigua travesía de la Nacional 630 en las tres avenidas. También, hizo referencia a otras actuaciones deportivas, industriales y de vivienda y a la "fortuna" de la apertura de la nueva sede del Cenatic y a la concesión del título de Ciudad de la ciencia y la innovación .

Para el 2011, prevé que será el año "de la culminación" de proyectos "pequeños, pero importantes" como el yacimiento de Huerta Montero, la reforma de la plaza de la Libertad, las actuaciones ejecutadas con cargo a los fondos del segundo plan E y los fondos europeos Feder o la ampliación del Palacio del Vino y la Aceituna. "Pero seguirán otros como los programas de los Servicios Sociales y se iniciarán otros como el nuevo colegio en San Roque, el Palacio de Justicia, la comisaría o la supresión de los pasos a nivel", apuntó.

UNIDAD Y RESPONSABILIDAD En definitiva, Ramírez se siente "satisfecho" por como ha ido el año, pero reconoció que lo estaría más si se acabará la situación actual. Así, igual que hizo en su felicitación navideña la pasada semana, en esta valoración volvió a pedir unidad a los ciudadanos para lograrlo. "Para ganar la guerra se necesita unidad, responsabilidad y solidaridad; son palabras que dijo el Rey en su discruso de Navidad y que la verdad valen para todo", comentó el alcalde. Señaló que para aplicar estas ideas "hay que evitar actitudes de egoísmo, no desertar e ir a la retaguardia y ayudar lo máximo posible a los que lo necesitan". Por ello, finalizó su valoración del año con una frase de Winston Churchill: "Nos costará sangre, sudor y lágrimas" para pedir a los ciudadanos unidad para formar una sociedad "mucho más justa e igualitaria", ya que Almendralejo se ha caracterizado por ser una localidad "con vocación, pujante y abierta a las nuevas economías emergentes", concluyó.