Durante la pasada madrugada han vuelto a producirse varios robos en empresas ubicadas en la carretera de Badajoz, en esta ocasión empleando el método del butrón.
Una de las perjudicadas es Graginsa, donde en una semana han entrado a robar tres veces. En la primera destrozaron una caseta portátil de obra de la que sustrajeron diverso material y en la segunda (ocurrida en la madrugada del martes) se llevaron las tuberías de cobre de cinco máquinas de aire acondicionado además de romper la valla (este robo se valoró en unos 30.000 euros). El tercero se desarrolló en la madrugada del miércoles al jueves y afectó a las oficinas. Según explicó uno de los responsables de la empresa, Angel Arias, los presuntos ladrones esta vez saltaron al interior de las instalaciones entrando por el tejado de las oficinas y una vez dentro las destrozaron. Abrieron todos los cajones, removieron los papeles y encontraron la caja fuerte, de la que sustrajeron dinero en metálico (entre 500 y 600 euros), algunos documentos y papel de letra. Además, abrieron un butrón en la pared para poder sacar la caja fuerte. Según Arias, los ordenadores no se los han llevado y la alarma la arrancaron para que no sonase.
Los otros robos tuvieron lugar muy cerca de Graginsa, en distribuciones Chicurri y en el restaurante La Retama. Según el responsable de la primera empresa, también destrozaron la puerta principal de acceso para entrar y rompieron los vehículos estacionados fuera. Además, rompieron la puerta para entrar en el almacén donde también causaron daños. Creen que solo se han llevado un paquete de bebidas que tenían preparados para una despedida de soltero este fin de semana. También revolvieron las oficinas, sobre todo los papeles de los vehículos.
Pero los presuntos ladrones aprovecharon que se encontraban en las instalaciones de Chicurri y abrieron un butrón en la pared contigua al restaurante La Retama para entrar en este, donde volvieron a causar destrozos pero no se llevaron casi nada, ya que el dueño tenía abierta todas las máquinas tragaperras para evitar precisamente estos robos.
REACCION DE LOS DUEÑOS Los propietarios de estas empresas han expresado sus quejas y declararon sentirse impotentes ante esta oleada de robos, sobre todo en el caso de Graginsa por los sucesivos hurtos, asegurando que ya no saben qué hacer para evitarlos. Mientras que el dueño de Chicurri señaló que tenía pensado irse en julio al chalet que tiene junto a las instalaciones, pero que por temor está pensando no irse.
Durante el último mes, se han producido varios robos en empresas de este polígono industrial, como el de Eurotex (que se llevó a cabo por el método de alunizaje) y el de Editex.
