La Junta de Extremadura ha garantizado la continuidad de los servicios que estaba prestando la Orden San Juan de Dios en Almendralejo, una vez anunciada ayer su marcha de la ciudad tras diez años de funcionamiento. La Consejería de Sanidad y Servicios Sociales, a través de un comunicado, ha mostrado su sorpresa por este anuncio de la Fundación San Juan de Dios de Extremadura sobre su decisión de dejar de prestar los servicios en el hospital Nuestra Señora del Pilar y la residencia.

El Gobierno regional ha querido trasladar «un mensaje de tranquilidad, tanto a la ciudadanía de Almendralejo como a los trabajadores y usuarios del hospital y la residencia San Juan de Dios, garantizando la continuidad del servicio a través de otra entidad u operador. De hecho, ya hay negociaciones avanzadas con otro operador, según desveló ayer el alcalde de Almendralejo, José María Ramírez.

Desde la Junta insisten en que «ni la consejería, ni el Servicio Extremeño de Promoción de la Autonomía y Atención a la Dependencia (Sepad) han recibido comunicación oficial por parte de la fundación sobre esta decisión».

Opciones / La Junta ha informado que la consejería había ofrecido a San Juan de Dios un plan de estabilidad y viabilidad económica con una duración de cuatro años a través de los conciertos sociales y transferencias. También indica que desde el año 2015, el Sepad ha mantenido la subvención con esta funcación y que los recortes a los que se refiere la entidad, de un 28%, se hicieron en 2012 con el gobierno popular de Monago.

Según explican en el comunicado desde el Ejecutivo Autonómico, «la disminución de ingresos a la que alude la Fundación viene motivada por la falta de justificación del cien por cien de los gastos derivados de la subvención». Aclaran que este año sí cobró la cantidad íntegra de 464.000 euros.

Ayuntamiento / Ramírez ha señalado que la marcha de la Fundación San Juan de Dios alude a «una decisión empresarial porque no ven viable la continuidad. Les hemos intentado convencer, pero respetamos su decisión».

El alcalde critica que la Fundación haya echado culpas a Cajalmendralejo por no venderles el edificio y desvela que la entidad financiera no les ha querido cobrar el alquiler durante el covid-19 «en un gesto que hay que poner en valor».