La Concejalía del Servicio de Limpieza estudia la posibilidad soterrar los contenedores poniendo los primeros en la zona centro y después en el resto de barriadas, y ello pese a que el delegado de este área, Tomás García, reconoció: "Este sistema que, a priori, parece muy eficaz, no está dando los resultados que debía tener en las ciudades que los tienen".

De hecho, el concejal señaló que estos contenedores están causando una serie de problemas que hay que tener en cuenta antes de ponerlo, entre los que cito la posibilidad "de que no quepa la basura o que en las zonas huecas donde se quedan restos de residuos aparezcan ratas". Además, hay que añadir, dijo García, que para la empresa mixta de limpieza supondría hacer una inversión importante al tener que cambiar los camiones de recogida por otros con un sistema diferente, que incluyan "camiones plumas o de succión porque los de ahora lo tienen trasero".

EXPERIENCIA PILOTO Pese a estos inconvenientes, la intención del gobierno es incluir en los presupuestos del 2010 una partida para hacer una prueba piloto en el centro para ver qué resultado tienen, y sí resulta eficaz se instalarían en toda la ciudad.

García también comentó que hay que tener en cuenta la inversión que supone implantar este sistema. Cada contenedor soterrado tiene un coste de unos 36.000 euros y actualmente hay unos 3.500 distribuidos por todas las barriadas, pero como los soterrados tienen una capacidad más grande de almacenar residuos se reduciría el número de contenedores y no habría que sustituirlos todos, explicó.