Miles de almendralejenses disfrutaron de una gran convivencia en el parque de Las Mercedes que refuerza los valores de la familia y que ha calado bien fuerte entre los vecinos de la ciudad, ya que en esta segunda edición la participación superó a la del primer año. El Día de la Familia volvió a ser una gran fiesta de juegos, eventos y actividades acompañado de un tiempo agradable y buena temperatura, lo que ayudó para que las Mercedes revistiera un gran ambiente durante todo el domingo.

La asociación de familiares de personas con TDAH organizó un gran desayuno de migas con churros para iniciar la jornada, donde obtuvo una recaudación de más de 300 euros para impulsar su colectivo recién creado. Divididos en las distintas zonas del césped del parque, los más pequeños disfrutaron de yincanas con bolas, aros, picas y varios raid de aventuras. No faltaron los juegos hinchables o los cuentacuentos, donde Silvia Sanz derrochó toda su experiencia con los más jóvenes.

A los niños les gustaron especialmente las exhibiciones de los cuerpos de seguridad, que desplazaron hasta allí vehículos y un arsenal de material con los que deleitaron a los niños y también a sus padres. Allí estuvieron presentes agentes de policía nacional e integrantes de Guardia Civil y bomberos.

«Es algo muy bien pensado y montado. Es un entorno donde hay mucho espacio, está todo muy bien cuidado y se pueden hacer muchas cosas. Nosotros estamos disfrutando como niños con nuestros nietos», decía una de las abuelas presentes que aprovechaba para pintar la cara a su nieto. «Para nosotros es también un día importante porque sin salir de casa puedes juntar a tus hijos con tus padres y pasar un día juntos», decía un padre que había venido con toda la familia.

Cruz Roja y Provida aprovecharon para dar fuerza a la segunda operación bebé y recoger los últimos pañales de la campaña, buscando la solidaridad de los almendralejenses. «Este año hemos tenido más gente y creo que los almendralejenses ya van conociendo la importancia de tener un Día de la Familia y saber aprovecharlo», decía Carmen Reviriego, concejal de Juventud.