El Tán-gram es un juego chino basado en siete elementos. Cultura, educación o la salud son algunos de ellos. Estos elementos coinciden con las áreas en las que trabaja la asociación Tán-gram de Almendralejo. Un colectivo formado por voluntarios que dedican parte de su tiempo a que personas con diversidad funcional puedan disfrutar de la cultura, del ocio o de la educación como uno más.
Tán-gram comenzó su andadura en diciembre del año pasado. Después de su primer año cumplido, realiza su labor sin que sea muy conocida en la ciudad, pero quienes la conocen lo agradecen enormemente. La idea surgió de la joven almendralejense Verónica López,que trabajaba en una asociación de otra localidad y le propusieron hacer una actividad similar a la labor que hace ahora con Tán-Gram. Redactó un proyecto para Almendralejo y se lo presentó a nivel privado a los padres de personas que tienen alguna diversidad funcional. Poco a poco la iniciativa fue en aumento, gracias al boca a boca, y ahora cuenta con un grupo de 15 personas, que van desde los 10 años a los 50.
Desarrollo
A Verónica se le sumaron más voluntarios que colaboran en esta asociación hasta llegar a los diez actuales. Todos tienen formación relacionada con temas sociales o de salud. Son trabajadores de asociaciones o de centros sociosanitarios o desempleados que aún no encuentran la posibilidad de ejercer en un trabajo relacionado con su titulación. Aprovechan los fines de semana, los puentes o las vacaciones de estas personas para realizar las actividades con ellos. Comenzaron saliendo a cenar, a ir al cine o a dar paseos por la ciudad durante los fines de semana. Pero poco a poco fueron ampliando sus actividades y ya han celebrado un campamento de verano con ellos o han hecho dos viajes (Lisboa y al Tajo).
Según su presidenta, dan autonomía a los chavales para que elijan lo que quieran hacer, para que ellos paguen a la hora de llegar la cuenta del restaurante o de pedir la entrada en el cine. Se pretende también que ellos sean autónomos en ciertos aspectos, que vean que tienen capacidad de decidir y que pueden divertirse como cualquier otra persona.
Desarrolla tres programas. Uno es Yo como tú . Así se conoce al proyecto inicial de Tán-gram y que se cita anteriormente. El siguiente está dirigido a los mayores. Este también se ha puesto en marcha con clases de memoria y talleres sobre salud para ellos. Y el tercero es una mezcla de los dos anteriores. Mochila y zapatillas es un programa de viajes, pero con ambos grupos. Ya hicieron uno en conjunto viajando a Lisboa un fin de semana.
Trabajo sin lucro
Los voluntarios hacen esta labor de forma altruista y tampoco se les cobra a los usuarios. Simplemente dan un servicio, pero sí se hacen socios pagando 20 euros al año y cada uno abona su cena o entrada de cine. López asegura que los padres están muy contentos y satisfechos con la iniciativa y cada vez más le conocen en restaurantes de la ciudad, que no dudan en ayudarles. La labor de Tán-gram se está conociendo en Almendralejo por el boca a boca. Hace unos meses se presentaron al ayuntamiento, que les otorgó una subvención para realizar el campamento. No hay ningún otro colectivo que haga este servicio en concreto. Sus voluntarios aseguran que hay que ir poco a poco y tratando en todo momento que este proyecto sea algo continúo y no esporádico.
