La delegación de Tráfico ha retirado durante toda esta semana las bandas reductoras que había en distintas calles de la ciudad, según explicó el concejal de este área, Juan Manuel Forte.

Esta medida se ha tomado debido a la inestabilidad de las bandas, ya que el tráfico masivo y el paso de los vehículos hacen que se despeguen de la calzada. Además, muchos ciudadanos se han quejado del excesivo ruido que producían los coches cuando pasaban por ellas.

En su lugar, se instalarán pasos de peatones elevados como los que hay en la avenida de Goya. "Estos pasos consiguen el mismo objetivo que las bandas, reducir la velocidad de los conductores cuando llegan a ellos, y además son más duraderos, aunque más costosos, ya que cada uno cuesta un millón de pesetas", explicó el edil.

Los pasos se instalarán en las mismas calles donde se encontraban las bandas reductoras, como López de Ayala o en la carretera Santa Ana. "Se irán poniendo poco a poco, ya que requieren cierto estudio, y después se intentará poner en otras vías", añadió Forte.