El economato social de Almendralejo quiere acabar el año ayudando a cien familias. Este nuevo servicio se puso en marcha hace pocas semanas y actualmente acuden a él unas 30 familias de la localidad. La intención es aumentar sus recursos para que se pueda alcanzar las cien en unos meses. Este economato fue inaugurado ayer por parte del consejero de Salud y Política Social, Luis Alfonso Hernández Carrón, el alcalde, José García Lobato, la directora gerente del Sepad, Cristina Herrera, el presidente de Cajalmendralejo, Sebastián Guerrero, y miembros de la Fundación San Juan de Dios, entre ellos el padre José Luis Fonseca.

El economato se encuentra ubicado en las instalaciones de la fundación (antiguo hospital El Pilar) y su funcionamiento se debe a la coordinación de tres patronos (San Juan de Dios, Cajalmendralejo y el consistorio). Ellos compran los productos fundamentalmente a grandes mayoristas y al precio de compra le hacen un descuento del 75%. De esta forma, la familia que acude al economato solo paga el 25% de cada producto. Existen algunas empresas que hacen donaciones, como por ejemplo una fábrica local dedicada a los huevos de granja que se los regala.

Los Servicios Sociales valoran quiénes son las familias susceptibles de ir al economato y a cada una se le pone un presupuesto máximo que puede gastar en el economato dependiendo de las circunstancias de cada una. Acuden dos veces a la semana a comprar y se les hace un control del gasto. Existe un grupo de 25 voluntarios que les asesora.

Lobato anunció ayer que la intención es llegar a cien familias y también implicar a más particulares que quieran hacer donaciones para aumentar así el presupuesto para comprar comida. El edil aseveró que es la inauguración que más ilusión le ha hecho como alcalde porque es una ayuda que permite llegar a muchas personas que tienen una necesidad, "aunque es algo dura". Además, señaló que esta iniciativa es un reflejo de cómo "complicarse la vida", porque lo fácil es dar el dinero a las familias para que compren donde quieran, como hacía el consistorio hasta ahora. Por su parte, Carrón agradeció a los patronos del economato y también la labor que hace los voluntarios porque "sin ellos no sería posible". Asimismo, Guerrero recordó que Cajalmendralejo estará siempre comprometida con este tipo de labor con el objetivo de que nadie pase hambre.