Que no nos toquen ni el vino ni el cava en Almendralejo, pero hombre, tampoco se puede rechazar una buena cerveza en la tierra. Eso pensaron muchos de los que asistieron a la I Feria Ibérica de la Cerveza que se celebró en la plaza de Espronceda y que congregó a cientos de curiosos y amantes de la cerveza que pudieron probar su bebida favorita con decenas de sabores y aromas. 14 empresas elaboradoras presentaron más de 60 referencias para que los asistentes pudieran degustar y evaluar. Porque en la feria de la cerveza, el público ejerció de jurado.

Hasta Almendralejo se desplazaron artesanos de la cerveza de muchos puntos de Extremadura y hasta cerveceros de Portugal. Hubo dos concursos. Por un lado, el público eligió las mejores cervezas elaboradas de forma profesional. La ganadora fue la Rubia Tonta, de Cabeza del Buey, con gran aceptación de los asistentes. Le siguieron por este orden Barona de Marvao (Portugal) y Piporra (Aceuchal). Los premios fueron hechos por los chicos de Includes Almendralejo, quienes también tuvieron el honor de subir al escenario para entregarlos.

También hubo otro concurso para elaboradores caseros, un certamen Homebrewer que promueve estilos libres de prepara esta bebida. La dupla formada por Alberto Morcajuelo y Juan Jesús Revilla fueron los ganadores.

Los almendralejenses y llegados de otros municipios de la comarca respaldaron la feria con alta participación en todas sus actividades, incluidas las catas celebradas en el teatro Carolina Coronado. En la tierra del vino y del cava, también hay un trozo de mesa para una buena cerveza.