La mayor zancada hacia la solidaridad se da cada año en la San Silvestre escolar que organiza el colegio Montero de Espinosa y que en esta ocasión ha alcanzado la séptima edición. Y lo es no solo por los casi 900 participantes ni por reunir a alumnos de centros educativos de la comarca, sino, porque, verdaderamente, esta simbólica carrera recoge cada año casi la mitad de los alimentos de la Macro Operación Kilo que organiza la Plataforma Solidaria de Almendralejo durante estas fechas y que sirve para que en todas las casas, sobre todo en las que tienen menos recursos, los alimentos básicos nunca falten.

«Aquí, la carrera es lo de menos. Es más una convivencia y la San Silvestre un vehículo relacionado con el deporte para, en el fondo, ayudar a los demás, que es de lo que se trata», destacó Juan Luis Ortiz, director del colegio que ha estado presente en todas las ediciones.

Este año participaron casi todos los centros de Almendralejo, incluido Includes, que se llevó una gran ovación a su llegada. También un colegio de la vecina localidad de Alange. Son todos alumnos de cuarto de ESO para que vayan rotando.

No faltaron los bailes, la música y la tradicional exhibición de zumba de Víctor Ventura, todo un especialista. Ganar no era lo importante. De hecho, ni siquiera hubo clasificación. Solo valían las zancadas de solidaridad y de esas hubo muchas.