Fenómeno editorial es el calificativo que mejor cuadra a la que sin duda ha sido la novela del año, Soldados de Salamina y su autor, el extremeño Javier Cercas, aún no sale de su asombro por este suceso paranormal como el mismo escritor lo califica.

Un día se desayuna con los elogios que le dedica Mario Vargas Llosa en Perú a su novela, "elogios de una generosidad desproporcionada, una locura maravillosa", confiesa humilde el escritor en una entrevista. Y esta estupenda crítica del escritor peruano acaba de dar el empujón definitivo a la novela.

El libro, una novelada recreación de la investigación de un hecho acaecido en la guerra civil española --cómo el falangista Sánchez Maza salva su vida tras un fusilamiento y escapa con ayuda de unos jóvenes--, ha sido premiado por los escritores, los libreros y los lectores. Pero esta historia --y todo lo que ha escrito-- es el fruto de una venganza: la del niño que fue arrancado de su tierra y se hizo escritor para resarcirse de esa distancia, de la emigración. Así lo explica Javier Cercas en una entrevista publicada en este diario.

LA EMIGRACION

Con sólo cuatro años de edad, Javier Cercas abandonó junto a su familia --padres y cuatro hermanos-- su Ibahernando natal. Era un 28 de diciembre de 1966 y la dirección que tomaron era la de Cataluña. Como tantos y tantos extremeños hijos de la emigración, Javier Cercas se siente muy a gusto en Cataluña, una tierra que también considera suya, que le dio cobijo y en la que se ha hecho escritor, incluso dice que no le importa que le confundan con un catalán más, aunque no olvida sus raíces y sus recuerdos de la infancia. "Ser extremeño --dice-- no es un mérito, es una fatalidad".

En una entrevista concedida a el PERIODICO EXTREMADURA, el autor confiesa que de no haberse marchado a tierras catalanas probablemente "habría sido más feliz pero nunca escritor".

Javier Cercas vive en Gerona con su mujer y su hijo y donde es profesor de Literatura en la Universidad. Sin embargo, aunque en su DNI figura como profesión la de profesor, el autor se considera sobre todo escritor, porque "escribiendo llegas a sentirte una persona decente", afirma. La de escribir es una actividad vital para Cercas, mientras que la de profesor es la que le permite sobrevivir.

El escritor sabe y así lo expresa que el regreso a Extremadura "es imposible", pero no es óbice para que cada verano vuelva a su tierra natal a recuperar el contacto con sus raíces, porque, explica, echa de menos a su gente y le gusta "oír cómo habla la gente, el paisaje, los olores, el campo, la comida: esto es mi familia", concluye Cercas.

SER ESCRITOR

A los catorce años ya tenía claro que quería ser escritor y tres años después, narra en la entrevista publicada por este diario, se tomó muy en serio lo de ponerse a escribir, un paso que dio cuando leyó al maestro Jorge Luis Borges. Pero no fue hasta el año 1987 cuando publicó su primer relato, porque, admite, sintió vergüenza de emular a los grandes.

El primer libro de Cercas que vio la luz fue uno de relatos: El móvil . Luego ya encauzado su estilo, salieron publicadas las novelas El inquilino y El vientre de la ballena . Además de novelas, Javier Cercas es articulista y un conjunto de crónicas periodísticas suyas vio la luz en la recopilación Relatos reales , un conjunto de textos publicados en la edición catalana del diario El país .

Esta recopilación sirvió a Cercas para "salir del estudio de casa a la calle , tal y como el mismo lo describió. Aunque no se considera periodista, estas crónicas le acercan a la literatura, "en el periodismo aprendí a escribir directamente en el ordenador; aprendí que había que salir a la calle y que había que concentrar muchos los textos. Aprendí, en fin, que en una buena crónica tenía que haber una emoción, una idea, una historia".

Precisamente, este conjunto de textos periodísticos fue un paso adelante al que después siguió el libro que le ha valido el reconocimiento nacional e internacional: Soldados de Salamina .

Antes también había publicado el libro de artículos Una buena temporada ; y un ensayo sobre la obra literaria de Gonzalo Suárez.

EL FUTURO

Tras el baño de éxito de Soldados de Salamina , que traerá secuelas seguramente, Javier Cercas no se plantea repetir el esquema de esta novela en la próxima que escriba. Es contudente en su respuesta y advierte a los lectores que no esperen otro libro-reportaje. "Ahora escribo a ciegas; no se adónde voy, pero sí sé que no me gustan los escritores que se repiten".

La guinda a este fenómeno literario será la película que está rodando el director David Trueba sobre Soldados de Salamina , con la actriz Ariadna Gil y Ramón Fonseré, de Els Joglars, como protagonistas. Cercas se divierte asistiendo al rodaje.