La fábrica de harina, un edificio de principios del siglo XX, alberga en la actualidad el museo del turrón de Castuera. Se distribuye en cuatro plantas donde encontramos toda la maquinaria original; las cintas transportadoras de grano, los molinos o las planchas. El museo conjuga el sabor de la tradición y el arte del buen hacer del turronero.