El museo de alfarería de Salvatierra de los Barros exhibe como pieza del mes un azarcón, un objeto característico de la cocina tradicional. Se trata de una vasija que se usaba para calentar agua colocándola al lado de la lumbre. El azarcón tiene una forma semejante al cántaro, con la boca más ancha, pero generalmente cuenta con un asa y una tapadera.