El Museo Extremeño e Iberoamericano de Arte Contemporáneo (Meiac) acoge desde mañana La nadadora , una instalación que propone Maite Cajaraville (1967, Llerena) e incluido dentro del ciclo Post-Local Projects de apoyo a la creación de jóvenes artistas extremeños. Se trata de una proyección múltiple en una sala cerrada donde se presenta la imagen de una nadadora experta que, de manera casi imperceptible, comienza a tener fallos en la natación hasta un inesperado desenlace, una secuencia empleada como metáfora de la búsqueda de la perfección en la sociedad actual y los desajustes que provoca.