Unas 200 personas secundaron ayer el acto de apoyo a los agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil que han sido desplazados a Cataluña con motivo de la celebración del referéndum independentista, que convocó la Asociación de Policías Locales y Bomberos (Aspolobba) con el objetivo de mostrar su respaldo y solidaridad hacia estos agentes vivien momentos difíciles.

El presidente de Aspolobba, Manuel Manzano, pidió a la clase política que se dé «toda la cobertura posible» a estos efectivos para que puedan ejercer sus funciones «en las mejores condiciones». «Esas funciones las juramos en el cargo y son defender la Constitución y las leyes, y eso es lo que están haciendo», recordó.

El representante sindical aseguró que por las conversaciones que mantienen a diario con los agentes desplazados conocen «su preocupación», no solo por ellos, sino por sus familiares. «Están siendo señalados y tildados de terroristas vestidos de uniforme y eso es una barbaridad a la que el Gobierno le tiene que poner coto cuanto antes», reclamó.

Aunque el sindicato policial no se invitó expresamente a la convocatoria a ningún responsable político y solo se hizo un llamamiento a la ciudadanía, al acto, que se desarrolló en la plaza de España asistieron el alcalde, Francisco Javier Fragoso, acompañado por miembros de su equipo de gobierno, el portavoz municipal socialista, Ricardo Cabezas, junto a algunos de sus concejales, y el edil no adscrito Luis García-Borruel. Fragoso volvió a destacar la labor que realizan la Policía Nacional y la Guardia Civil en la defensa del Estado de derecho y las libertades y resaltó que este acto de apoyo era especial porque lo convocaba un «cuerpo hermano». «La fortaleza de la democracia va a triunfar y las cosas volverán a la normalidad en toda España», afirmó.

También estuvieron presentes en la concentración representantes de sindicatos de la Policía Nacional y miembros de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (Augc).