Hay en Badajoz 315 mujeres que son víctimas de violencia de género y que tienen que convivir con algún tipo de protección ante posibles agresiones machistas, aunque «en ninguno de estos casos las mujeres están en situación de riesgo extremo». Así lo manifestó ayer la delegada del Gobierno en Extremadura, Cristina Herrera, tras presidir el acto de constitución de la primera Mesa Local de Coordinación Policial de Violencia de Género, de Badajoz, en el Instituto Municipal de Servicios Sociales.
Herrera, que estuvo acompañada de la concejala de Servicios Sociales, Rosario Gómez de la Peña, personal técnico de las dos administraciones, del Imex, de Cruz Roja y mandos de los cuerpos de seguridad, expresó su «apoyo y ánimo a las víctimas y a las instituciones que trabajan en su ayuda y asistencia».
Con la constitución de la mesa se cumple el protocolo de actuación entre la Junta, el Gobierno y la Fempex, al que se adhirió el pleno pacense en marzo pasado.
De los 315 víctimas de violencia de género de Badajoz, 300 corresponden a la ciudad, 15 a las pedanías de Villafranco, Novelda, Gévora y Valdebótoa, y cinco del total son menores.
La delegada del Gobierno aseguró que «el compromiso del Estado en esta lucha es firme y para ello destina 408 millones de euros, aumentado esta partida en 80 millones, como se establecía en el Pacto de Estado sobre Violencia de Género», en partidas de Sanidad, Justicia, Interior, Empleo o Hacienda.
