Desde ayer unos 600 usuarios del programa de ayuda a domicilio que gestiona el Instituto Municipal de Servicios Sociales (IMSS) no reciben este servicio en la ciudad y la situación continuará así durante las dos próximas semanas. El motivo es que el martes, 30 de septiembre, cumplieron los contratos de las 158 auxiliares que prestaban esta ayuda, pero el Ayuntamiento de Badajoz no ha podido realizar antes las nuevas contrataciones porque la notificación de la subvención que concede la Junta, a través del decreto Empleo Experiencia ,no se ha recibido hasta el 18 de septiembre, según explicó ayer la concejala del área, Rosario Gómez de la Peña. Esta subvención se destina a la contratación de personal en los ayuntamientos, y el pacense destina los fondos íntegramente al servicio de ayuda a domicilio.

La edil señaló que tras recibir la notificación, desde su delegación se ha tenido que solicitar al Sexpe estos trabajadores. De hecho, ayer por la tarde se llevó a cabo en Ifeba la selección de personal para contratar a las 143 auxiliares que cubre la subvención este año, que son 17 menos que durante los dos últimos años y medio (aunque el IMSS había solicitado que se incrementasen a 175).

Una vez cubiertas las plazas, se debe cumplir una serie de trámites administrativos previos a la formalización de los contratos, que deben estar listos como máximo el 20 de octubre. Gómez de la Peña aseguró que desde el consistorio se hará "todo lo posible" por agilizar la burocracia para que la prestación se restablezca de forma progresiva "en 15 días".

¿Qué ocurre con estas personas durante este tiempo? "Es muy complejo. La única solución es darle el servicio, pero no podemos mandar a una señora que veas por la calle a cuidar de alguien, todo tiene un procedimiento", respondió la concejala, quien reconoció que, aunque habrá familias que puedan "apañarse", en otros casos el problema es más grave. Por ello, instó a que se tomen medidas para que la situación no se repita "intentando que la subvención pueda estar resuelta antes de que termine la del año anterior". Asimismo, recordó que no es un servicio propio del ayuntamiento el asistir a personas dependientes, sino que solo lo gestiona y no puede asumir esa competencia "porque seríamos la Junta".

No obstante, la responsable del Instituto Municipal de Servicios Sociales entiende que la demora en la comunicación de la subvención --que asciende a 11.000 euros por trabajador contratado-- no se ha hecho "a propósito", sino que puede ser fruto de la burocracia. Este diario solicitó a la Junta su versión, pero no obtuvo respuesta.

La concejala recordó que no es la primera vez que se debe interrumpir este servicio por esta causa, pero apuntó que se da la circunstancia de que en el 2006 se estableció una subvención para este año y para el 2007, que se prorrogó seis meses más en marzo del 2008. Así, las mismas auxiliares han prestado el servicio ininterrumpidamente durante dos años y medio, aunque ahora el personal cambiará porque el objetivo del decreto regional es favorecer que el mayor número de personas acceda a un empleo.

Del servicio de ayuda a domicilio que se presta a través del Instituto Municipal de Servicios Sociales se benefician actualmente más de 900 personas. De ellas, más de 300 no se verán afectadas por la supresión temporal del mismo, ya que son atendidas por las 54 auxiliares de la cooperativa Serascoop, concesionaria del servicio, que sufragan conjuntamente la Junta (75%) y el ayuntamiento (25%). Gómez de la Peña explicó que la aportación que reciben de la Administración regional es de 330.901 euros, pero que el consistorio, además de los 101.300 euros que le corresponden, debe aportar otros 243.446 de sus propios fondos para sufragar el desfase entre el precio por hora que contempla la Junta, 6,18 euros, y el precio real que se paga, 9,59 euros.

En estos momentos, hay 700 demandantes en lista de espera para recibir la ayuda a domicilio.