Siete jóvenes, tres de ellos menores de edad, fueron sorprendidos la madrugada de ayer por agentes de la policía local bañándose en la piscina municipal de San Roque, a la que accedieron a través de una de las vallas metálicas, en la que había un agujero. Los hechos ocurrieron sobre las 2.45 horas y al carecer de documentación, los jóvenes fueron trasladados a la comisaría para ser identificados. Del caso se ha dado parte al juez de guardia y a la fiscalía al haberse observado daños en el patrimonio público.

En la valla que rodea estas instalaciones se podía observar ayer que esta no es la primera vez que alguien accede a la piscina de esta forma, pues había marcas de que con anterioridad se han hecho otros agujeros en la misma.