El titular del Juzgado de Instrucción 2 y el fiscal tomaron ayer declaración a Carlos Alberto Benito y a José María Martínez de la Concha, funcionarios imputados por la Fiscalía Anticorrupción junto a los empresarios de Golf y Jardines del Guadiana, Angel Medrano y Rafael Alvarez Buiza, acusados de los supuestos delitos de estafa y contra la ordenación del territorio, en relación con el Canal de Badajoz.

Entró primero Martínez de la Concha, jefe de Urbanismo y secretario de la comisión del Area Técnica y Seguimiento del Plan General, a las nueve de la mañana. Después lo hizo Benito, arquitecto jefe de Coordinación y Gestión Urbanística.

El abogado de ambos, José María Calero, manifestó que ninguno de los dos tiene relación con los hechos señalados en la querella de Anticorrupción y que permanecieron "tranquilos, seguros e indignados". Y añadió que las declaraciones fueron "en el sentido que yo esperaba; no hay absolutamente nada, ni de carácter penal, por supuesto, ni administrativo, ni siquiera irregularidades".

Para él es una querella "absolutamente infundada y lamento que sea la Fiscalía Anticorrupción la que la haya promovido".

En su opinión, la labor de los funcionarios ha sido "intachable". Y expresó su esperanza de que el fiscal retire la querella.

Del fiscal dijo que "desconoce algunos términos de derecho urbanístico que quizás se tenía que haber preparado antes de presentar la querella, pues ha tenido tiempo en la fase de información previa, medios y además la ley le ampara, pero esa es su responsabilidad, no la mía".