Varios vecinos del edificio donde se produjo una explosión la madrugada del pasado día 6, en los grupos de Santa Teresa, cuando supuestamente un hombre manipulaba una bombona, expresaron su temor por el estado de sus viviendas y a que vuelva el inquilino del piso donde se produjo la deflagración.

Indalecio Gómez y su esposa Ana Pérez, matrimonio al que se le vinieron abajo las paredes de un dormitorio y parte de otro cuando dormían con su hijo de 4 años, aún viven fuera de su casa, "porque están arreglando los dormitorios", pero se quejan de que no les dicen nada sobre los desperfectos en la cocina y el cuarto de baño.

El marido alertó a última hora de la mañana de que había pisos en los que han aparecido grietas. Su mujer contó que ella está "a base de pastillas y mi hijo llora porque le da miedo", así como que los peritos de las aseguradoras no se ponen de acuerdo.

José Manuel Aguedo Peña vive encima de donde se produjo la explosión y dice que cuando entraron los peritos del ayuntamiento no había daños, pero "ayer oímos un ruido extraño y no le dimos importancia, pero al volver había varias grietas que se van agrandando".

UN ESCRITO AVISANDO Aguedo, casado y con dos hijos, afirma que ha presentado un escrito en el consistorio "porque no conozco a los que vinieron a hacer la inspección el primer día para avisarlos; yo vivo de alquiler y se lo he dicho al dueño de la vivienda". Y explicó: "Ahí no nos acostamos por miedo, porque hay una esquina completa dañada".

María Mar Alonso, otra vecina, no tiene la casa dañada, pero se muestra indignada: "Vamos a firmar un escrito para presentarlo en el ayuntamiento y en el juzgado para que no vuelva esa persona, no lo queremos". Sonia de Pedro Delgado añade: "Ya hemos tenido muchas amenazas, hace un mes, con un palo porque hacíamos ruido y así muchas veces, con cualquier vecino". Lorena Rodríguez apostilla: "No queremos que vuelva, ya lo ha hecho dos veces; los niños están aterrorizados y no se quedan en casa porque les da pánico".

Fernanda Borba afirmó que "lo hemos pasado muy mal, con niños arrebujados con cobertores a las seis de la mañana y eso no lo queremos, vamos a pedir que ese hombre no vuelva".

La Concejalía de Urbanismo, a través del gabinete de prensa, señaló que ese asunto ya no es de su competencia; que envió a los técnicos "para una inspección preventiva, pero ahora se trata de un asunto particular". Así, señala que los vecinos deben pedir a sus técnicos o a sus seguros que evalúen la situación.