Técnicos de la Consejería de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio están realizando una inspección para elaborar un informe con una valoración de los daños ocasionados por las tormentas de los últimos días en la comarca de Vegas Altas del Guadiana, la zona de Jerte y Guadalperales.

Así lo ha señalado el director general de Agricultura y Ganadería, Antonio Cabezas, acompañado por el secretario general de Desarrollo Rural y Territorio, Manuel Mejías, tras visitar los daños producidos en cultivos, a causa de los granizos de la tormenta de la pasada noche, en la Finca Municipal de Guareña.

Cabezas ha precisado que en unos días estará todo el informe completo y solicitarán, si se estima oportuno, "la declaración de zona catastrófica y las compensaciones económicas que puedan dar lugar dicha cualificación".

"Y todos esos daños, la Junta los tendrá en cuenta de cara al IRPF del año que viene y para todas las ayudas que puedan venir como consecuencia de esta desgracia", ha apostillado, según informa la Junta en un comunicado de prensa.

En el caso concreto de la Finca Municipal de Guareña, Antonio Cabezas ha indicado que "es triste que en tres años sea la segunda vez que venimos a esta finca con el mismo problema".

"El daño es de casi el cien por ciento en la zona de los melocotoneros y la ciruela también está bastante afectada, eso conlleva que los más de cien trabajadores de la Finca se queden sin actividad unos días", ha explicado.

No obstante, ha aclarado que la explotación está acogida a un seguro agrario, para lo que 12 peritos ya están realizando las peritaciones de frutales y tomate y otros cinco en otros cultivos.

En este sentido, ha pedido a Agroseguro "agilidad y generosidad" a la hora de efectuar unas valoraciones "ajustadas a la realidad" para "todo lo que suponga indemnizaciones y agilidad en el futuro para compensar las pérdidas a los que están asegurados".

El director general ha insistido en la necesidad y obligación a tener los seguros agrarios como mejor garantía de la renta de los agricultores ante estas desgracias para tener el respaldo de los seguros que recompensen toda la inversión realizada en la explotación y sus posibles beneficios.