El recorte de personal anunciado por el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, que ya se está haciendo efectivos, además de otras medidas de contención del gasto aprobadas en la Administración regional, han puesto en el ojo de mira a otras administraciones. Pero en el caso del Ayuntamiento de Badajoz, el alcalde, Miguel Celdrán, presume de austeridad, también en materia de personal, según manifestó ayer en declaraciones a este diario, mencionando el dato de que en el consistorio pacense no hay asesores y no sobra ningún puesto. Tanto es así que hay ámbitos desde los que se le critica la escasez de plantilla, como la que afecta a la Policía Local y al cuerpo de bomberos. El alcalde señaló que "ojalá pudiera hacer algo en beneficio de la economía municipal".

Celdrán señaló que lo que ha demostrado Fernández Vara con sus recortes de personal es que había "un montón de trabajadores que podía haber suprimido" y puestos de trabajo que proliferaron en épocas de bonanza económica. Tampoco convence al alcalde pacense el anuncio de suprimir el acto del Día de Extremadura para ahorrar. "No es ahorrar, porque lleva sin pagarlo dos o tres años y cómo va a seguir haciendo fiestas si no las paga", criticó.

Extrapolando estas medidas al ayuntamiento pacense, Celdrán señaló que en Badajoz "es muy difícil" tomar decisiones en esta misma dirección porque la situación no es comparable y apuntó que, como medida de austeridad y ahorro que su equipo de gobierno siempre ha mantenido desde que gobierna en la ciudad, a pesar de que el presupuesto con el que entró estaba muy limitado --según apuntó-- es que "todos los años siempre se reserva el 20%" del presupuesto municipal de cada concejalía, que no se adjudica, y si surge alguna necesidad de financiación imprevista "tiene que pasar por el santa santorum". De esta reserva ha surgido cada año un remanente "con el que hemos podido sacar la ciudad adelante", defendió.

El alcalde defendió que la situación económica actual requiere que todas las administraciones sean conscientes de que no se pueden exceder en los gastos y esperar a que el panorama mejore. Celdrán no cree que en Badajoz se puedan recortar más los gastos y en cuanto a las inversiones, apuntó que como el ayuntamiento tiene margen para solicitar un nuevo préstamo, lo hará con el objetivo de acometer proyectos pendientes, como el de la comisaría de la Policía Local.