El alcalde de Badajoz, Miguel Celdrán, está dispuesto a endeudar al ayuntamiento en 18 millones de euros (3.000 millones de pesetas), como única salida para resolver el problema de las expropiaciones pendientes en el Cerro de Reyes con motivo de la riada y que afectan a más de 300 propietarios, a la vista de que la Junta de Extremadura no está dispuesta a aportar más fondos.

Celdrán comentó ayer que desafortunadamente el ayuntamiento no tiene dinero para solucionar los problemas de todos los vecinos pero en este caso, lo que le queda, entre otras salidas es "rezar, porque tenemos fe en los milagros". Al mismo tiempo, anunció que "sin duda va a ver soluciones" y apuntó que cuando el PP llegó al ayuntamiento pacense la deuda municipal ascendía a 84 millones de euros (14.000 millones de pesetas), ahora está en 66 millones de euros "y es muy posible que antes de irme la deje en 84 y le deje el muerto al que venga, pero el problema solucionado". Para Celdrán, la solución pasa por "pedir una póliza de 18 millones de euros y que la pague el que venga de atrás".

A COROMINAS

El alcalde insistió en que el consejero de Urbanismo, Transporte y Vivienda, Javier Corominas, ha reconocido que una parte de las viviendas de realojo se han destinado a viviendas sociales o para las Cuestas de Orinaza, "luego ese dinero es el que pedía el alcalde" además de otras 64 viviendas en Hoyo de Calamón que no se han hecho. Celdrán no pone en duda la honestidad de Corominas, añade que también él lo es pero reprocha a la Junta que el dinero que procedía de la solidaridad de todo el país se repartiese como si fuesen ayudas de la Administración regional.

Más información:

La guardería de Cruz Roja en Llera empieza a funcionar

Un todoterreno para un aficionado a la caza y la pesca