A la casa situada en el número 26 de la calle Marqués de Monsalud, en San Roque, solo le quedan en pie las paredes. El interior de la vivienda está lleno de escombros, trastos viejos, basura y bichos. Los vecinos se quejan de tener que convivir con esta situación y temen que cualquier día los muros se desplomen y algún transeúnte resulte herido. Hasta ahora, la única medida de protección son unas vallas que ha colocado hace meses la policía local alrededor de la vivienda.
"Como mínimo lleva abandonada seis o siete años. Se han llevado el cobre de los cables, las tuberías... Ahora solo quedan basura y ratas", se quejó Rubén Ruiz, un vecino de la calle. Aunque las más afectadas son las viviendas contiguas a esta casa en ruinas, su estado preocupa al resto. "Cualquier día se viene abajo", advirtió otro vecino.
En esta misma calle también hay otras tres propiedades en muy mal estado. En una de ellas, en el número 46, los techos se han venido abajo y de la cochera y la casa que se encuentran al lado hace poco que se ha desalojado a unos okupas , según contó una vecina.
A pocos metros, en la esquina de las calles Porvenir y Extremadura se ha desconchado la fachada de otra casa abandonada y los cascotes siguen en el suelo. La policía también ha colocado vallas alrededor. "Lleva mucho tiempo así", lamentó un vecino. Los afectados piden que el ayuntamiento obligue a los propietarios a que las derriben o adecenten o actúe de forma subsidiaria.
