EL PRESIDENTE del Centro de Iniciativas Turísticas, Pedro Alfaro, bisnieto, nieto, hijo, padre y hermano de la Hermandad de la Virgen de Bótoa, fue el encargado anoche de pregonar la romería, situación que aprovechó para rendir un homenaje a las lavanderas, para las que pidió un monumento aprovechando las obras de desdoblamiento de la carretera de Cáceres, pues en el fuerte de San Cristóbal se hacían las primeras rogativas. El pregón de Alfaro fue un reconocimiento a todas las tradiciones en torno a esta romería, a los colectivos que las están recuperando, aludió al 150 aniversario de la Inmaculada y trazó anécdotas y curiosidades.