Los cerca de 200 alumnos del Instituto de Enseñanza Secundaria Bárbara de Braganza que el jueves tuvieron que suspender las clases porque la intensa lluvia que cayó afectó a sus aulas, pudieron volver ayer al centro.

La actividad se reanudó "con normalidad" en seis de las aulas que se mojaron, sin embargo la del grupo C de tercero de la ESO no pudo ser aún ocupada, por lo que estos alumnos tendrán que seguir sus clases durante un par de días en otro aula del centro, según Rafael Domínguez, director del instituto.

Estaba previsto que entre ayer y hoy se reparase el bajante roto que causa la inundación de estas aulas. "Es muy antiguo y está en el interior, por lo que hay que romperlo para sacarlo al exterior y evitar que el agua entre en el edificio", según Domínguez.

Esta es la solución que han dado los técnicos de la Dirección Provincial de Educación hasta que se cambie la cubierta del edificio, una obra que, según han comunicado a la dirección del instituto, saldrá a concurso "de manera inminente" para que pueda acometerse el próximo verano, "ya que en el invierno es imposible, y menos con los alumnos dentro", señaló.

El pasado invierno, este instituto sufrió el mismo problema a causa del temporal de lluvia y granizo.