La reacción de la Asociación de Amigos de Badajoz ante la sentencia del Tribunal Supremo, que no se puede recurrir, ha sido discreta después de diez años de litigio judicial. La directiva ha decidido no entrar a valorarla hasta que no lo haga el ayuntamiento, que es el que tiene que ejecutarla. Ayer, el vicepresidente de este colectivo, Manuel Márquez, se limitó a declarar que "no se aparta en nada de lo que estábamos esperando", ya que desestima todos los motivos que el consistorio esgrimía para no proceder a la demolición parcial del Cubo. Con esta sentencia, el Supremo devuelve las actuaciones el TSJEx y se reanuda la orden de ejecución.
