La Asociación Amigos de Badajoz ha pedido al Ayuntamiento y la Junta de Extremadura que no derriben la construcción que hay en una de las rotondas de la ronda norte. A pesar de que el arqueólogo del Area de Rehabilitación Integral (ARI) de la Junta de Extremadura concluyó que estas ruinas no son de la primitiva ermita de San Roque (aunque si el edificio más antiguo de la barriada), el colectivo mantiene que se trata "del único ejemplo" de lo que eran los antiguos oratorios, humilladeros o ermitas que se colocaban en las salidas de las ciudades.

Amigos de Badajoz defiende que aunque esta construcción no destaca por su importancia arquitectónica, si lo hace por su "valor simbólico y su historia". El colectivo señala que en el exterior solo se aprecia una casa "vulgar" fruto de los añadidos que se han ido haciendo a la antigua ermita "que se conserva completa en el interior".

Por ello, proponen que se realice un estudio que permita rescatar los elementos de interés y que se recupere la construcción para dotar a la ciudad de "un edificio histórico" y al barrio de San Roque "de su seña de identidad más antigua".