Dos años después de que la Diputación de Badajoz cediese una parcela de 2.200 metros en Huerta Rosales para la construcción de un nuevo centro, la Asociación de Padres de Personas con Autismo de Badajoz (Apnaba) sigue pendiente de obtener financiación para poder construir el edificio. El tiempo pasa y el problema se agrava, porque no se trata de estrenar instalaciones, sino de poder ampliar servicios esenciales, lo que ahora es inviable por las limitaciones de espacio que existen.

Es el caso de la residencia (funciona las 24 horas del día durante todo el año) con todas sus plazas ocupadas. Ahora solo dispone de 11 y hay lista de espera. Con el nuevo centro se podría multiplicar el número por más de cuatro, alcanzando las 48. «Todo es una prioridad, pero ampliar el servicio de residencia es una necesidad imperiosa», reconoce Pedro Trenado, gerente de Apnaba. Hay personas con autismo de las que por su sintomatología sus familias no se pueden hacer cargo y también otras cuyos padres han fallecido o son mayores para poder seguir viviendo con ellos. Esta es una realidad que cada día afecta a más usuarios y a la que urge dar una solución.

Además de la residencia, al nuevo edificio también se trasladaría el centro de día, que actualmente cuenta con 20 plazas y «un espacio muy justo», que podría pasar a atender a cerca de un centenar de usuarios, así como el servicio de habilitación funcional, que en estos momentos presta 220 tratamientos, «lo que supone que estemos casi al límite», lamenta Pedro Trenado.

El cambio de estas prestaciones a unas nuevas instalaciones permitiría además descongestionar las actuales, junto al parque Bioclimático, donde se mantendrían el centro de Educación Especial, cuyas aulas se podrían ampliar, y el servicio de atención temprana (con 60 plazas).

Hasta ahora los responsables de Apnaba han llamado a muchas puertas para buscar los 4 millones de euros que necesitan para este proyecto, pero ninguna se ha abierto. Por eso, han iniciado conversaciones con la Junta de Extremadura que, según Trenado, se ha comprometido a ayudarlos en la búsqueda de financiación. «Nos dan esperanzas de que se va a construir, pero no hay plazos ni fechas», apunta el gerente de Apnaba. «Aunque no tenemos ninguna certeza, tenemos que confiar, porque nos dicen que las gestiones están muy avanzadas», añade.

La intención de la asociación es que el centro se construya en una sola fase para ahorrar costes y también para que pueda funcionar cuanto antes, pero todo dependerá de la financiación que se consiga. El proyecto básico del futuro centro ya lo tienen. Se trata de un inmueble de tres plantas, con una superficie construida de 4.210 metros cuadrados, que incluyen el sótano, siendo edificables 3.325 metros cuadrados.

Apnaba atiende en la actualidad a unos 300 usuarios, una cifra que se eleva año a año. La prevalencia de la enfermedad es de un caso de Trastorno del Espectro Autista (TEA) por cada cien nacimientos y cada vez los diagnósticos son más precisos. La asociación tiene concertados algunos de los servicios con el Sepad y otros son privados. El centro educativo depende de la Consejería de Educación. De momento, haciendo «malabares» se están prestando todos los servicios, pero Trenado reconoce que llegará el día en el que no podrán cubrir la demanda si no se amplían las plazas, por lo que no quedará más remedio que la administración derive a los usuarios a otros centros donde se puedan aplicar los tratamientos. Actualmente, solo Apnaba, en Badajoz, y Aftea, en Cáceres, son «centros especializados» en autismo, aunque también existen otras asociaciones en diferentes poblaciones de la región que están trabajando con la intención de ser acreditadas por el Sepad para impartir tratamientos.

Hace tan solo unos días, el 13 de diciembre, se cumplieron 28 de la constitución de la Apnaba. Desde entonces, esta asociación ha trabajado de manera incansable en la atención y protección de las personas con autismo. Ahora el reto es ver cuanto antes construido ese nuevo centro que resuelva los problemas de espacio y permita seguir dando una cobertura integral de calidad a sus usuarios.