María del Carmen, Domingo, Ángel, Víctor y Manolo son cinco discapacitados intelectuales que conforman el centro de empleo especial denominado Aprosuba 3, Artes Decorativas, S.L, situado en Badajoz y que se dedica a elaborar piezas artísticas de alta decoración que se exportan a Rusia e Italia, entre otros destinos, donde decorarán entidades bancarias, hoteles e incluso casas particulares. En la empresa, que lleva en funcionamiento tres años, los empleados trabajan artesanalmente el alabastro y la madera, para reproducir obras artísticas principalmente del Renacimiento y la mitología romana y griega, tales como bustos, cuadros en relieve, marcos de espejos, entre otros muchos ornamentos. Domingo, tras dos años de permanencia en el taller, es el responsable del espacio dedicado a la reproducción: "Mi trabajo consiste en hacer la masa de la piedra y meterlo en el molde. El primer procedimiento es hacer la masa como si estuvieras haciendo pan, luego se prepara el molde, y antes de llenarlo se limpia y tras sacarlo va directamente al otro espacio para que los compañeros lo decoren", detalla. Una vez concluida esta parte, el molde pasa a otras instalaciones del taller para su decoración. En este segundo espacio, la reproducción es retocada y se le aplican diversas técnicas para de este modo concluir un acabado de alta calidad. Por su parte, María del Carmen es la trabajadora más antigua que participa en el proceso decorativo y, mientras aplica láminas de oro con mucha delicadeza, describe "lo grata" que resulta su dedicación y "el orgullo" que siente al concluir un encargo que será distribuido en destinos tan dispares e internacionales como, Italia, Rusia, Portugal, Ucrania y, por su puesto, España. Para el director industrial de Aprosuba, una asociación dedicada a trabajar por la mejora de las personas discapacitadas y de sus familias, el éxito de este centro de empleo, que "compite en igualdad de condiciones con cualquier otra empresa de decoración", y al que "pronto se incorporarán nuevos trabajadores", radica en "la adecuación de la actividad" para personas con alguna discapacidad y, por supuesto, "en la dedicación de sus trabajadores". "Gracias al esfuerzo de este grupo de personas con discapacidad que creen en sí mismas y que se han lanzado al mercado" se puede demostrar a la sociedad que "pueden lanzar un producto muy competitivo, de alto valor artístico y técnico", el cuál es "muy valorado por el cliente", asegura el director. Los integrantes de este centro de empleo han acudido a la Feria Internacional de Arte y Decoración, celebrada recientemente en Valencia, de donde al parecer han regresado con más de cien encargos, en los que trabajan actualmente.