Una semana después de que los vecinos denunciaran el retraso de las obras previstas por Aqualia en Llera para sustituir la red de saneamiento, éstas se acaban de iniciar en el tramo de la carretera de Olivenza. La empresa tardará diez meses en renovar los colectores de 11 calles, la práctica totalidad del barrio.

Esta actuación es la segunda más importante del Plan Director de Saneamiento, asciende a 2 millones de euros, después de la que se hizo en San Roque, que ascendió a 3 millones, según recordó ayer el concejal de Aguas, Francisco Javier Fragoso.

Hasta final de año, se excavarán en Llera más de 9.000 metros cúbicos y se instalarán más de 2.100 metros lineales de tubería de PVC, que sustituirán a las antiguas de fibrocemento. Para ello se levantarán 17.500 metros cuadrados de calzada, 661 de aceras y 225 metros lineales de bordillo.

Será una obra compleja, con una dificultad añadida porque "convivirá con los ciudadanos", según Fragoso, quien aseguró que se intentará hacer "lo menos molesta posible".

El problema en Llera surgió porque el crecimiento demográfico fue "muy concentrado en el tiempo", lo que dio lugar a que la capacidad de los colectores no fuera suficiente, por lo que las aguas fecales entraban en carga e inundaban casas y calles. Esto se solucionará sustituyendo las tuberías de 300 milímetros de diámetros por otras de 500 y 800.

El concejal de Aguas reconoció que se produjo un retraso en la obra, que se iba a iniciar en mayo, porque, según dijo, hubo que acabar antes las obras de saneamiento en San Roque, "que tuvieron alguna dificultad".

OTRAS OBRAS También anunció que esta obra se hará de forma paralela con la de la depuradora del Corazón de Jesús, que empezará este mes. La siguiente del plan director será la de La Picuriña. Fragoso aseguró que esto ayudará a generar empleo.

Las que tendrán que esperar por falta de financiación serán las de la red de saneamiento de la Urbanización Guadiana y Ciudad Jardín, donde las averías son contínuas. El ayuntamiento tendrá que "buscar dinero" para acometer estas actuaciones, valoradas en 2 millones de euros en el caso de la Urbanización Guadiana. La de Ciudad Jardín aún no ha sido valorada por los técnicos. De momento, la solución más sencilla es, en su opinión, que Aqualia arregle las tuberías cada vez que se rompan.

En el caso de Alvarado, aseguró que se está trabajando "a campo abierto" y la obra para abastecer a esta pedanía estará en el plazo previsto, aunque la climatología no está ayudando.