La empresa concesionaria del servicio de agua en Badajoz, Aqualia, ha recibido hasta ayer 24 reclamaciones de otros tantos usuarios porque les ha aplicado a consumos realizados a finales del 2008 las tarifas del 2009. El exconcejal de Aguas y aún delegado de Consumo, Alberto Astorga, fue quien ayer informó de este dato, para demostrar la escasa repercusión, pues en Badajoz Aqualia tiene 68.000 clientes y señaló que la propia empresa las contestará "aunque al ser tan escasas, no creemos que haya una irregularidad masiva en la facturación".

Pero tanto la Unión de Consumidores como el grupo municipal socialista, que dio la voz de alarma, han venido alertando sobre la posibilidad de que no hubiese muchas quejas, pues se trata de cantidades muy pequeñas las que se han cobrado de más (rondan el euro) que sin embargo, al sumarse, sí suponen una importante cuantía que Aqualia habría cobrado indebidamente si finalmente se demuestra que los denunciantes tienen razón.

El concejal del PSOE José Ramón Suárez insistió ayer en su denuncia y lamentó la "dejación de funciones" por parte del equipo de gobierno en este asunto, del que se está beneficiando Aqualia. Suárez informó de que el portavoz del grupo socialista ha realizado una reclamación formal ante Aqualia y el Instituto de Consumo y varios concejales y usuarios a instancias del PSOE han hecho reclamaciones.

Astorga señaló en su día que esta forma de cobro viene así contemplada en el pliego de condiciones. Pero Suárez calificó de "torticera" la interpretación que pueda hacerse del apartado donde se habla de la facturación, que textualmente señala que se hará "de acuerdo con la normativa que en cada momento rija a efectos de tarifas". Ayer el concejal del PP no se mostró tan tajante y reconoció que lo que dice el pliego de condiciones "es interpretativo" porque no deja claro si se aplican las tarifas en el momento de facturación o de consumo.

Astorga reiteró que él no ve en esta cuestión "ningún viso de ilegalidad" pero apuntó que deben valorarlo los servicios jurídicos "y si es ilegal, que se corrija". El concejal comentó que la forma de actuar de Aqualia de este año es la misma que en ejercicios anteriores desde 1994, cuando se revisó la concesión.

Suárez mencionó una sentencia del 97 que condenó a Seragua por un caso idéntico. Astorga dijo que no la conoce pero reconoció que se ha interesado por su contenido "y si sirve de antecedente para corregir lo que se considera que se hace mal, el ayuntamiento no tiene absolutamente ninguna objeción".