El Arzobispado de Mérida-Badajoz sigue a la espera de que se le ceda una parcela en Cerro Gordo para iniciar la construcción de la iglesia. La solicitud se realizó al ayuntamiento hace alrededor de dos años y en diciembre del 2017 se le volvió a remitir toda la documentación, por lo que el proyecto está pendiente de que se tome una decisión al respecto, según explicó Manuel Fernández Rico, párroco de esta barriada, quien reconoció que los trámites burocráticos están siendo «más largo» de lo que esperaban.

La previsión, cuando se anunció el proyecto en mayo del 2016, era construir la iglesia por fases y que la primera se pudiera iniciar en el plazo de un año y medio, tiempo que ya se ha superado. «La gente está ilusionada y pregunta por el templo que, aunque no es urgente, sí es necesario», apuntó Fernández Rico, quien se mostró convencido de que el ayuntamiento hará todo lo que esté en su mano para que se resuelva cuanto antes.

El arzobispado solicitó una parcela de más de 2.000 metros cuadrados en la calle Batalla de La Albuera para levantar el templo y otras instalaciones parroquiales que den servicio «a quienes son creyentes y a quienes no lo son», pues la intención es que disponga de diferentes espacios que sirvan para dar cobertura a las necesidades de los vecinos.

La idea inicial, aunque hasta que no dispongan del suelo no se encargará la redacción del proyecto, es que el templo tenga capacidad para unas 150 personas, además de dependencias para despachos, reuniones, una zona para atención social y un espacio verde que pueda ser utilizado por todos «para compartir y crear comunidad», avanzó el párroco.

«No queremos una macroiglesia, sino que sea funcional y que pueda dar servicio a todos», insistió Fernández Rico, quien aseguró que no tienen intención de invertir «un dineral» en este proyecto, cuyo coste se ajustará «a la austeridad que corresponde a la Iglesia en estos momentos». Las obras se financiarán, según explicó el arzobispo en su día, como las últimas parroquias que se han levantado en Badajoz: la diócesis costeará una parte y el resto de irá sufragando con las aportaciones de los fieles, con las que se cubrirá el préstamo bancario.

Aunque sin una iglesia al uso, los vecinos de Cerro Gordo cuentan con una parroquia desde octubre del 2016. Se ubica en un local de la calle Lady Smith cedido por la asociación de vecinos, con capacidad para unas 60 personas, un despacho y un par de salas. Aunque se van «apañando» con estas instalaciones, el párroco reconoció que tienen muchas limitaciones de espacio, pues cuando hay celebraciones especiales «no se cabe». Esta parroquia da servicio también a los vecinos de la Urbanización Golf Guadiana.