El arzobispo de Mérida-Badajoz ha reorganizado los arciprestazgos ante la reducción de sacerdotes, entre otras circunstancias. Como novedades, destaca la división del de Almendralejo, que ahora queda separado del nuevo de Villafranca de los Barros. O la unión de Zalamea de la Serena y Castuera. Además, se han producido trasvases de poblaciones entre arciprestazgos. También ha nombrado nuevos párrocos en la provincia y Chachapoyas.