El equipo de gobierno municipal cree conveniente abrir una nueva oficina de recaudación voluntaria, atención al ciudadano, cobro y gestión porque las instalaciones de la calle San Juan se han quedado muy limitadas, paralelamente a la decisión de reforzar el servicio de Tesorería con seis nuevos funcionarios, al mismo tiempo que el servicio de recaudación en ejecutiva pasa al OAR, dependiente de la Diputación de Badajoz.

El ayuntamiento realizará el servicio de recaudación voluntaria con más trabajadores pero volverá a sacar a concurso el asesoramiento, que ahora asume FS y cuyo contrato concluye el 31 de enero, aunque le será prorrogado hasta que se resuelva la nueva concesión.

Con esta pretensión, el pleno municipal aprobó ayer, con la abstención del PSOE, la modificación parcial de la relación de puestos de trabajo del ayuntamiento y la creación de seis nuevas plazas de funcionarios para la ampliación del servicio de Tesorería. Una vez que han pasado por pleno, se abrirá un periodo de quince días y si no se presentan alegaciones, se harán operativas. Son dos plazas de técnicos de Administración General (grupo A2), una de administrativo, dos de auxiliares administrativos y otra de operador informático.

La concejala de Personal, Maripaz Luján, explicó tras el pleno que la provisión de estos puestos de trabajo, como "verdaderamente hace falta" según lo avala un informe de tesorería que indica que es necesario ampliar el servicio de la recaudación de tributos, se hará en principio con carácter temporal para luego unirse a la oferta de empleo público del ayuntamiento.

El concejal de Hacienda, Alberto Astorga, reconoció ayer que con estas plazas lo que se hace es profundizar en un sistema en el que el ayuntamiento se hace cargo de la recaudación fortaleciendo sus servicios (ahora hay 15 funcionarios ente Tesorería y Gestión Tributaria y habrá seis más). El concejal apuntó que existen informes de consejos consultivos que avalan que hay que diferenciar las labores que debe realizar la empresa auxiliar, que solo deben ser de colaboración y de apoyo pero nunca funcionariales que supongan ejercicio de autoridad o custodia de fondos públicos. Según Astorga, Badajoz "merece un servicio propio".