El Ayuntamiento de Badajoz ha admitido todas las correcciones que la Junta de Extremadura pedía que se introdujesen en el nuevo Plan General de Ordenación Urbana de Badajoz, según aseguró ayer la concejala de Urbanismo, Cristina Herrera, quien admitió que no han puesto ninguna objeción a las directrices del gobierno regional, con cuyos técnicos han estado trabajando, a pesar de que con algunas no estaban de acuerdo. La Junta introdujo 113 cambios, pero Herrera explicó que sólo unos pocos son "estructurales" y por eso tienen que ser de nuevo expuestos públicamente para la presentación de alegaciones.

Entre estos cambios estructurales está el que afecta a la línea de exclusión de la riada, que es la zona que las tres administraciones establecieron tras las inundaciones para que no se volviese a construir en las orillas de los arroyos Rivillas y Calamón, que se convertirán en espacios verdes. Pero el ayuntamiento había introducido lo que el equipo de gobierno había llamado "remates urbanísticos", que según los cálculos del PSOE suponían construir 550 viviendas. Ya el presidente de la Agencia Extremeña de la Vivienda, Javier Corominas, advirtió hace meses de que no iban a admitirlo y ahora, el ayuntamiento ha rectificado. Según Herrera, se cumple el acuerdo entre administraciones, "salvo un piquito" donde se prevé construir unos 20 pisos. La concejala dijo que los técnicos de la Junta están de acuerdo.

DUDAS Sin embargo, el portavoz socialista, Moisés Cayetano, puso en duda que el ayuntamiento esté respetando la línea de exclusión porque según se desprende de los planos que le han facilitado él calcula que se mantienen unas 200 viviendas, pero está pendiente de un análisis más minucioso. En cualquier caso, Cayetano apunta que se han alterado mucho los planes iniciales del ayuntamiento en el entorno de los arroyos. El concejal de IU, Manuel Sosa, por su parte, dijo que si es verdad que la Junta y el ayuntamiento han pactado todas las rectificaciones, significa que el Ejecutivo regional "desautoriza" al grupo municipal socialista.

Otro asunto discrepante hace referencia a los Núcleos Urbanos Secundarios, que antes eran Areas de Admisibilidad Residencial, de las que existen 21 en el entorno de la ciudad. El ayuntamiento establecía que las áreas ilegales necesitaban un plan especial, con las cesiones correspondientes (al ayuntamiento, de equipamientos y de VPO) así como las áreas que no habían desarrollado sus planes especiales. Pero en las que ya tenían su plan regulado, el ayuntamiento pedía que se les eximiese de estas cesiones, porque son zonas ya consolidadas. La Junta no lo aceptaba y establecía que se estudiaría cada situación, no de forma general. En esta última situación están Tres Arroyos, Dehesilla de Calamón, Río Caya, Corazón de Jesús, Golf Guadiana y La Atalaya. Sin embargo, según Sosa, el ayuntamiento ha buscado una solución ilegal y "especulativa" porque permite ampliar estos núcleos para poder satisfacer estas cesiones obligatorias, aunque al tratarse de suelo urbano no consolidado tiene que estar delimitado y no se puede ampliar.

Respecto al Suelo Urbanizable Sin Condiciones, que se prevé como reserva, la Junta pedía que se estableciesen requisitos y han puesto las del suelo anexo.