Pudiera parecer que los portavoces del PP y del PSOE en el Ayuntamiento de Badajoz, Alberto Astorga y Celestino Vegas, respectivamente, no se referían a las mismas cuentas, pues los análisis que ambos realizaron ayer durante el pleno ordinario de la liquidación de los presupuestos del 2012 eran hasta contradictorios. Mientras Vegas se cuestionaba si el ayuntamiento está o no arruinado y afirmaba que en este consistorio "se presupuestan cosas que después no se ejecutan" porque "no hay un duro", Astorga respondía que "para estar arruinados mucho estamos aguantando, porque el ayuntamiento paga, lo saben los bancos, los constructores y los proveedores".

Según defendió Astorga, tienen un remanente líquido de tesorería positivo de 53 millones de euros, gracias a "una gestión económica modelo" y de esta cuantía se van a poder dedicar 12,6 millones de euros al nuevo plan de impulso a la economía local, para el que también ayer se aprobó una modificación presupuestaria con el voto el contra del PSOE.

El remanente de tesorería es un dato contable que viene determinado por la diferencia entre el dinero que se va a recaudar, el que hay que pagar y el que existe en caja y todos los años se modifica. Según explicó Astorga, el ejercicio pasado se incrementó en 10 millones de euros y por eso "nos podemos permitir el lujo" de aprobar el expediente del plan de impulso "porque presupuestamos los ingresos con cierta modestia".

Vegas criticó que de los 30 millones presupuestados para inversiones solo se han acometido 8, poco más del 20%. Astorga dio su explicación, según la cual ha habido que modificar una partida importante para aportarla a la Inmobiliaria Municipal hace unos meses destinada a El Campillo "y hubo que sacrificar inversiones", que ahora se "compensan y aumentan" con el plan de impulso. Respecto a este plan, tanto el PSOE como IU coincidieron en reclamar que se debería hacer hincapié en la creación de empleo y preguntaron cuántos puestos de trabajo prevén crear, pues el equipo de gobierno no los ha calculado. Para Vegas, las inversiones anunciadas ahora no son más que "intentar tapar necesidades de la ciudad" y también el portavoz de IU, Manuel Sosa, lo definió como una "chapucilla" a dos años de las elecciones, a la vez que cuestionaron algunas de las partidas que se van a gastar, como el arreglo de Santa Catalina o los toldos de la calle San Juan.

Astorga reconoció que la liquidación se tendría que haber presentado durante el primer trimestre del año, como viene reclamando el PSOE. Según el concejal del PP, se produjo una discrepancia de datos en tesorería e intervención en el volcado a un programa informático nuevo y los dos servicios han estado conciliando las cuentas para poder cuadrarlas.

El PSOE también votó en contra del reconocimiento extrajudicial de crédito correspondiente a más de 70 facturas pendientes de pago, por una cuantía superor a 1,6 millones de euros, que datan incluso del 2006, fecha en la que incidió Vegas, y a la que Astorga restó importancia, la misma actitud que adoptó en relación al contenido del informe de la interventora, en el que alerta de contratos en los que se han vulnerado los principios de publicidad y transparencias y no ha existido igualdad de trato. Según el concejal de Hacienda, este mismo informe se repite cada año porque "es un reparo estándar".