Un informe jurídico de Urbanismo del Ayuntamiento de Badajoz indica que se debe incoar un expediente sancionador por infracción urbanística grave en Golf Guadiana, debido a que no se ha dado uso como apartahotel a un conjunto de 70 alojamientos, tal como figura en el proyecto concebido por etapas que se acogió a la Ley de Oferta Turística Complementaria.

Este informe, que fue dado a conocer ayer por la concejala de Urbanismo, Cristina Herrera, en el seno de la comisión municipal de este área, es el resultado de las denuncias que ha venido realizando desde hace meses el concejal de IU, Manuel Sosa, sobre irregularidades urbanísticas acometidas por la empresa promotora de Golf Guadiana y que el concejal va a trasladar al fiscal anticorrupción.

SIN SERVICIOS COMUNES Del informe se desprende que no se ha tenido conocimiento oficial de que no funcionaba el apartahotel hasta que el concejal de IU hizo la denuncia. Se ha comprobado que la licencia de ocupación es correcta, de acuerdo con un certificado final de obra pero los propietarios no le han dado el uso correspondiente como apartahotel, que exige servicios comunes, sino que son residencias privadas e independientes, con lo cual no han aportado la licencia de apertura. Cristina Herrera defendió que es imposible comprobar que los alojamientos no funcionan como apartahotel si no existe una denuncia.

Según Herrera, no ha prescrito el posible expediente sancionador, que se puede abrir. El informe considera que las edificaciones construidas están "fuera de ordenación" e incluso habla de "viviendas clandestinas". Eso implica que sus propietarios no pueden hacer ninguna obra, salvo de mantenimiento. Por lo tanto, dado que no se ha cumplido con la construcción del apartahotel, no procede urbanizar ni construir ninguna etapa posterior del plan de actuación.

Lo más grave, según la concejala, es que en octubre del 94 (Herrera dejó claro que en que en aquella fecha gobernaba el PSOE) se concedió una licencia de parcelación de 150 parcelas correspondiente a la cuarta etapa, y que no se debería haber concedido, ya que el apartahotel, correspondiente a una etapa anterior, no existía. Esta parcelación "es ilegal y hay que analizar si se incoa el procedimiento oportuno de nulidad o anulabilidad y todo lo que significaría", señaló. Si se anulase esta licencia, la finca debería devolverse a su estado inicial, con el perjuicio que ello implicaría para los nuevos dueños de las parcelas.