El abandono del edificio del mercado de Santa Ana, que lleva año y medio cerrado, es cada día más evidente, al menos en el exterior, aunque es fácil imaginar cómo se encontrará el interior. La fachada está cubierta de grafitis y los desconchones se multiplican en la parte inferior de la visera, donde ya es visible el esqueleto de la construcción. Los focos siguen en su sitio porque están protegidos con rejillas pero en las entradas al piso inferior, solo tapadas con rejas, se acumula la suciedad y la pestilencia.

Mientras se encuentra un destino a este singular inmueble ubicado en el casco antiguo, la concejala de Urbanismo en el Ayuntamiento de Badajoz, Cristina Herrera, anunció ayer que han dado las órdenes oportunas para que los técnicos estudien la posible rehabilitación del mercado de Santa Ana. La edil explicó que independientemente del uso que se vaya a dar, previamente se tiene que realizar un estudio de la situación en que se encuentra el edificio, qué partes habría que mantener y qué trabajos deberían hacer.

Estos estudios previos, según la concejala "tardan bastante" y añadió que además habrá que hacer una valoración de los trabajos de mantenimiento.

Respecto al concurso de ideas que el equipo de gobierno propuso en su día para buscar un destino al mercado, la titular de Urbanismo señaló que esta posibilidad se ha descartado porque con este tipo de concursos se plantean cuando se pretende realizar "un edificio insigne o singular" pero en este casos se trata de mantener lo ya construido y rehabilitarlo.

LA OPCION CON MAS NOVIOS La última idea que defendió hace meses la concejala de Urbanismo para reutilizar esta construcción fue la de transformarlo en un mercado de artesanía. Cuando lo anunció dijo que abría un plazo prudencial para que los vecinos se pronunciasen, pero no volvió a hablarse del tema, aunque Herrera recordó que cuando esta propuesta se expuso a la opinión pública, fue "la que más novios tuvo".

Ayer, insistió en que ésta es la opción con más posibilidades. Sea cual sea el destino final, lo que sí tiene claro el equipo de gobierno es que la actividad que allí se realice debe atraer a gente a la zona. Sí está ya decidido que en el mercado habrá "una especie de bar", independientemente de la actividad a la que se dedique el inmueble.

Finalmente, comentó que la rehabilitación del mercado de Santa Ana es una de las pocas pendientes dentro del casco antiguo de Badajoz, por parte del ayuntamiento. Recordó que se ha acondicionado la puerta de Mérida, la ermita de Pajaritos, los jardines de la Galera, las casas mudéjares, el antiguo ayuntamiento, la torre de Espantaperros y el claustro de San Agustín, entre otros espacios.