En estos momentos regar una hectárea de jardines públicos con el agua que está utilizando el servicio municipal, ya tratada, cuesta 3.000 euros anuales. En la ciudad existen más de 50 hectáreas de zonas verdes, con lo cual el ayuntamiento se gasta cada año en regar sus espacios ajardinados 150.000 euros (25 millones de pesetas), un coste que se reduciría de forma notable si en lugar de agua potable se utilizase agua sin tratar, procedente del río Guadiana. Regar una hectárea de jardín con el agua del río costaría entre 108 y 120 euros. La diferencia es abismal, un 96% más barata, pero para ello habría que establecer un sistema de canalización que extrajese el agua del Guadiana y la acercase a su destino. La decisión depende de la disponibilidad de recursos.

Ayer, el concejal de Aguas en el Ayuntamiento de Badajoz, Nicasio Monterde, comentó que uno de los retos del servicio es la necesidad de ahorrar en las campañas de riego de las zonas verdes. Según Monterde "no podemos estar regando con agua tratada que cuesta un dinero considerable el metro cúbico para los jardines, que a veces llega a destiempo y se producen pérdidas de agua considerables". Si un metro cúbico de agua tratada cuesta 30 céntimos, la misma cantidad procedente del río no llega a 3 céntimos.

Monterde informó de que existen estudios realizados por el servicio municipal para intentar mejorar ese riego mediante tuberías conectadas directamente al río Guadiana y utilizar "agua bruta" para el riego, en lugar de agua ya depurada, con el coste que conlleva. Aunque el análisis data de hace dos años, la inversión prevista para canalizar el agua desde el río con varios kilómetros de tuberías y utilizarla en el riego de los jardines ronda 1,2 millones de euros (unos 200 millones de pesetas) que se deberían actualizar. Con esta inversión sería posible acometer el riego de prácticamente todas las zonas verdes de la ciudad. Según el jefe del servicio municipal "el ahorro sería considerable".

HACE DIEZ AÑOS Ahora es el momento de echar cuentas. Para el concejal, este proceso es un paso más a conseguir. "No olvidemos que hace diez años el servicio estaba prácticamente descapitalizado y obsoleto y ha habido que hacer fuertes inversiones y concienciar a la ciudad de Badajoz de que conllevaba un coste económico que todos hemos tenido que asumir".

Monterde reconoció además que aunque se han acometido obras importantes "el servicio todavía no está al cien por cien de capacidad óptima, pero poco a poco lo iremos consiguiendo". De todas formas "las instalaciones principales se encuentran en un estado óptimo de funcionamiento aunque siempre quedan flecos".

La asignatura pendiente más importante sigue siendo el saneamiento, porque en los últimos meses ha habido problemas debido a la antigüedad de la red en la zona del casco antiguo.

Monterde hacía estas declaraciones en el seno de las actividades organizadas por la empresa concesionaria del servicio, Aqualia, en la plaza de San Atón, con motivo del Día Internacional del Agua. Allí estuvo el alcalde, Miguel Celdrán, quien apuntó que aunque se diseñen campañas de concienciación sobre el ahorro en el consumo de agua, en la mayoría de los casos "entra por un oído y sale por el otro", por lo que cree más conveniente formar a los escolares, de forma amena, con actividades didácticas y también recreativas.